Alrededor de 2 de la madrugada, Hernán Piquín llegaba a su barrio cerrado en Pilar, Buenos Aires, con su auto cuando fue interceptado por delincuentes armados.
El bailarín intentó maniobrar para escapar, mientras gritaba y alertaba a sus vecinos.Los asaltantes, ante esta situación, se asustaron y comenzaron a disparar. En el intento de evadirse, Piquín terminó con su móvil cayendo en una zanja. Pese a ello, se encuentra en buen estado de salud.
El personal de guardia entró en acción pero finalmente, los delincuentes lograron escapar.
Los peritos llegaron poco después y tomaron algunos elementos de la zona del hecho, entre ellos varios cascos de bala.